La queja y el pesimismo son dos características inherentes a Latinoamérica. Nuestra historia ha estado llena de tantas tribulaciones, que en nuestro inconsciente colectivo, tendemos a reafirmar esa visión arcaica y colonialista de imperios pasados. Aunque presentemos traumatismos severos debido a ello, los nuevos tiempos nos demandan acciones mas que palabras, y así y solo así, saliendo de ese estado de pesadumbre general,y de la mano de gobiernos eficientes, seguramente alcanzaremos el nivel de desarrollo que tanto anhelamos.
Saludos.