A veces, damos por sentado a las personas, nos distraemos con banalidades e ignoramos su valiosa presencia, algunos solo nos damos cuenta de nuestro error cuando es demasiado tarde...
A veces, damos por sentado a las personas, nos distraemos con banalidades e ignoramos su valiosa presencia, algunos solo nos damos cuenta de nuestro error cuando es demasiado tarde...