Caminos cerrados se abren, caminos abiertos se cierran y entonces te preguntas, "que habría pasado de no haber cerrado ese camino o de no haber abierto aquel?"
Se gasta tiempo en preguntas como esa cuando la respuesta, que no responde nada, es clara. Si se cerró, es porque ya no tenía nada que fuese para ti.
Inconforme, claramente, como se siente luego de percibir un susurro sin sentido, que nunca supiste que era pero siempre recordaras haber escuchado.
Luchar, claro que si, así se demuestra que mereces algo, que quieres algo; y aunque a veces no se consigue, se aprende. Aprender? Por qué? Si al final, igual caemos en lo mismo. Cierto, pero ya se saben ciertas cosas y nunca es igual.
A veces, la mejor lucha está en la calma, en la paciencia, en la espera, a veces el silencio y la quietud son las respuestas, solo hay que saber comprender cada pista, cada señal y como una epifanía notas que no hay nada que buscar y que solo se debe seguir mientras aquello que tomó otro rumbo, si era para ti, vuelve a tu camino, con más cosas para ofrecer. Más vivencias, más experiencia. Si no vuelve, nuevas cosas vendrán.
Suena tedioso, es cierto, la naturaleza nos hizo impacientes pero nosotros nos hacemos sabios, y para ser sabios, mi estimado, no se puede ser impaciente porque hay cosas que así, no se comprenden.
Hola @lilasein, este post ha sido propuesto para ser votado por la cuenta @Cervantes.
Saludos.
muy bueno tu post! bendiciones
Amen y muchas gracias!
Me hacía falta escuchar una oda a la paciencisn tienes mi voto.
Muchas gracias! Me alegra que fuese oportuno!