Creo que es la pregunta que a diario se hacen miles de venezolanos que padecen cada vez más una crisis económica y social causada por un gobierno corrupto que busca las maneras de mantenerse en el poder. Es esta crisis la que ha hecho que miles de venezolanos hayan tomado la decisión de irse a otros países con el fin de conseguir una mejor calidad de vida para ellos y sus familias, una decisión nada fácil si pensamos en todo lo que dejan atrás pero con la esperanza de que con esfuerzo obtendrán cosas mejores.
Vivir en Venezuela es ver cada día como un país pierde sus ilusiones, metas y sueños, es ver la degradación de la sociedad que se ha acostumbrado a que le den las cosas en lugar de trabajar por ellas, es ver como los enfermos mueren por falta de medicinas, como los niños dejan de ir a la escuela porque sus padres no tienen como comprarle uniforme y útiles escolares, es ver cada día más familias separadas porque hay quienes deciden irse a buscar una mejor calidad de vida. Pero a pesar de ello hay quienes aún apuestan y quieren estar en el país que los vio nacer, no abandonar su hogar ni a su familia, aunque esto conlleve el soportar una situación cada vez más precaria que pareciera no tocar fondo.
Como venezolano me sorprendo al ver la pasividad de las personas ante hechos que quizá en otros países hubiesen causado revueltas o al menos un intento por restaurar la democracia, pero al contrario puedo observar una sociedad a la que ya nada le sorprende, que sólo se encomienda a Dios y espera algún tipo de milagro, no digo que este mal orar por una solución a esta crisis, pero creo que debemos empezar por nosotros mismos y no dejar que se siga pisoteando la dignidad de personas que aún nos queda.
Yo me pregunto esto todos los días, porque los sueños, las metas a corto plazo, el desaliento, la angustia, la desesperación de tener un par de centavos en la cuenta y trabajar todos los días, no es vida para nadie!
Creo que todos los venezolanos, no resignados al chavismo, hacemos lo mismo y siento que desde la noche del viernes la angustia es mayor.
Desde el viernes, no sabemos que hacer de verdad, a mi se me complico la vida!!!!
Luis, te leo y me veo en tus palabras, veo a mi hijoy mis sobrinos! Realmente, antes pensaba mucho que valía la pena quedarse y luchar y en lo que pude apoyé la oposición y más a la Resistencia, pero cada día más me voy quedando sin esperanzas. Te dejo aquí mi voto como apoyo personal a tu inicio porque me imagino que estás como muchos tratando de abrirte un nuevo camino y lo acompaño con un abrazo grande! Saludos!