TOME MAGNESIO…VIVA 100 AÑOS

Innumerables estudios médicos y testimonios en todo el mundo vienen dando fe, cada vez más, de la gran importancia que tiene el magnesio para la preservación de la salud de los seres humanos. Algunos aseguran haber vuelto a la vida después de consumir magnesio tras alguna penosa enfermedad.

¿Pero que es el magnesio?

El magnesio es un elemento químico cuyo símbolo es Mg, con número atómico 12. Es el cuarto mineral más abundante en el organismo, después del calcio, el fósforo y el potasio.

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Nuestros huesos, músculos, sangre y tejidos lo necesitan para producir energía, sintetizar proteínas y grasas, para la contracción y relajación de los músculos, para las funciones del sistema nervioso y para metabolizar, entre otros componentes, el calcio. Por tanto, el magnesio está directamente relacionado con, al menos, 400 funciones del organismo, aunque parezca increíble.

A pesar de la importancia del magnesio para el correcto funcionamiento del cuerpo humano, este noble mineral, hasta hace poco, era todavía desconocido para la mayoría de la gente. Siendo tan, o más importante que el calcio, no gozaba de su misma popularidad. Tradicionalmente, los médicos siempre han aconsejado consumir calcio, pues el calcio es realmente importante para el fortalecimiento de los huesos. Sin embargo, la ausencia de magnesio en el organismo puede revertir esos beneficios, ya que puede generar una sobrecalcificacion que terminará afectando seriamente venas, arterias y demás órganos vitales donde suele acumularse.

Afortunadamente, hoy día los médicos están reconociendo la importancia del magnesio, gracias a estudios e investigaciones que han demostrado que es fundamental para las funciones del organismo, y que las consecuencias de su deficiencia son negativas y preocupantes.

De hecho, en la actualidad, dos de cada tres personas están en riesgo de enfermar, pues no consumen el requerimiento de magnesio que deberían consumir, esto es, entre 300 y 400 miligramos por día.

El problema radica, por una parte, en que muchas personas desconocen que tienen deficiencia de magnesio, pues los exámenes regulares de sangre no lo manifiestan. Por la otra, alimentos como las semillas de cáñamo, de linaza, de sésamo, de calabaza, de girasol, almendras, avellanas, acelgas, verdolagas, aguacate y otros ricos en magnesio, generalmente no forman parte de la dieta de la mayoría de las personas en el mundo, lo que contribuye a aumentar el déficit de este mineral en la alimentación.

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Cuando esto ocurre, tenemos la posibilidad de consumirlo a través de los complementos disponibles en el mercado, como el cloruro de magnesio, el carbonato de magnesio y el citrato de magnesio.

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¿QUE ENFERMEDADES CURA EL CONSUMO DE MAGNESIO?

El consumo habitual de magnesio puede curar dolores articulares, hígado graso, cáncer, diabetes, triglicéridos altos, osteoporosis, enfermedades cardiovasculares, cálculos renales, retención de líquidos, insomnio, alzhéimer, fatiga, depresión, migrañas, dolores de cabeza, problemas de tiroides, entre otras.

¿ES EL MAGNESIO LA PANACEA DE TODAS LAS ENFERMEDADES?

De acuerdo a estudios científicos comprobados pareciera que está cerca de serlo, ya que casi todas las enfermedades que padecemos hoy en día, tienen su origen en una importante deficiencia de magnesio. Es algo que deberíamos tener en cuenta, especialmente si se tienen algunos de los siguientes síntomas: calambres, dolores articulares, taquicardias, vértigos, espasmos en los parpados, en el esófago, el estómago o el intestino, hormigueo en torno a la boca, hipo, sensación de bola en la garganta, se levanta cansado, da patadas dormido como si estuviera cayendo, o ve destellos de luz cuando cierra los ojos.

Cientos de personas en el mundo aseguran que el consumo del magnesio cambió sus vidas para siempre, curándolos de enfermedades de las cuales habían sido esclavos por años, y que se sienten sanos, enérgicos y rejuvenecidos.

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Suficientes razones para comentarlo con su médico de confianza y comenzar a consumirlo, si desea llegar a los 100 años, como muchos testigos aseguran.