"No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy".
Es de origen español. Es uno de los más conocidos. Significa que hay que ser diligente, en las tareas que te correspondan hacer durante el día.
Esta máxima fue siempre la favorita de mama. Aprovechaba cada oportunidad que se le presentaba para recordármela cuando era niño. Siempre me decía, unas veces como reproche otras como consejo. “Hijo. No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy”.
Su uso mejora tu vida en todos los aspectos: trabajo, familia, amigos. Cumplir oportunamente con las exigencias presente en cada rol, no es poca cosa.
Hoy recomiendo, que la flojera y las escusas dejen de estar presentes en nuestras vidas. Administremos bien nuestro tiempo. A veces no hay segundas oportunidades