El ojo y el universo, una comparación un tanto desproporcionada pero que nos da las mismas descripciones con un poco de subjetividad y romanticismo, nuestro pequeño agujero negro no deja escapar la luz con la que se nos permite ver, atraemos con ellos a aquellos que buscan ver mas de nosotros pero si se acercan mucho se dejan atrapar mas allá del horizonte de sucesos, logramos ver, gracias a esto, como las personas nos miran sin que ellos se miren a si mismos mirándonos, tal cual sucede en la ergosfera de un agujero negro, allí tenemos a la esclerotida actuando como tal por si queremos una comparación mas literal entre la ergosfera y la esclerotida, los distintos colores dentro del iris son como las nubes de gases que intentan escapar a la singularidad por su atracción, sucumbiendo tarde o temprano a esta.
Siento que nosotros mismos somos un universo andante, cada quien interpretando su existencia de manera tal que, se le da mas o menos importancia a la vida que intentamos vivir pero sin dejar de ser totalmente necesarios en este mundo.
Que cada quien mire las galaxias que tienen por ojos y déjense atraer por su poder gravitacional, perdiendo al momento toda noción de espacio y tiempo.
Estructura de un agujero negro y su similitud con el ojo.
curiosamente no escapa del contexto de la frase, dios nos hizo a su imagen y semejanza, y que hay mas átomos en nuestros globos aculares que estrellas en el universo...
Saludos y buenas tardes