Dios siempre está pendiente de sus hijos, todos los que creímos en Jesucristo como nuestro salvador formamos parte de Su Familia, donde Cristo mismo es nuestro hermano mayor. Así como cualquier hijo le pide lo que necesita a su padre, así mismo podemos acercarnos a nuestro Padre celestial y pedirle lo que necesitamos. Por la fe que tenemos en Dios vivimos los cristianos.
"Porque en Él la justicia de Dios se revela por fe y para fe como está escrito: pero el justo vivirá por la fe."
Romanos 1:17
Quien se acerca a Dios debe creer que Él existe y no dudar. Dios no desampara a los suyos y si pedimos conforme a Su corazón Él es fiel para con Sus hijos. Dios es un Padre amoroso, no quiere que nosotros pasemos hambre ni por ningún tipo de dificultades, pero el cristiano debido a la caída del hombre no está exento de sufrir adversidades. El apóstol Pablo supo vivir en la abundancia y también en la necesidad, y se refería a todo esto con un "todo lo puedo en Cristo que me fortalece".
La Palabra de Dios nos enseña en Proverbios a ser diligentes en cuanto al trabajo y a poner a Dios de primero en todo, para que nos limpie el camino y recompense nuestro esfuerzo. Que el Señor me los continúe bendiciendo
gracias a Dios