En la biblia, específicamente en Apocalipsis, Juan nos dice que el último enemigo que será destruido es la muerte. Hay que recordar que la muerte entró al mundo debido a la caída de Adán y esto fue un gran logro para Satanás. La muerte es una herramienta que desde entonces usa el diablo. Culpar a Dios de las muertes de los justos es no entender la consecuencia que trajo el pecado al mundo. Jesucristo no tuvo pecado y sin embargo fue condenado a muerte, es por esto que a Él se le dio autoridad sobre la misma muerte, pues Él no debió haber muerto según las leyes espirituales, pues "la paga del pecado es muerte". Gracias a este hecho importante ahora todos los que creemos en Cristo ya fuimos inscritos en el libro de la vida.
Respecto a la muerte de inocentes, no debemos culpar a Dios de esto, Dios no desea la muerte de nadie, la enfermedad no está en el mundo por obra de Dios sino del diablo. A pesar de todo, Dios mantiene una guerra espiritual para ayudar a los suyos y a que la humanidad toda tenga la oportunidad de conocerlo y de que puedan tener vida eterna. Esta vida es un parpadeo ante el tiempo en la eternidad, los sufrimientos son pasajeros, pero vale la pena soportarlos cuando tenemos asegurada la vida eterna.
"Dios no es hombre para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta". La equivocación no es algo que le pase a Dios, Él no es como nosotros, Él es perfecto y en su perfección trabaja para que lo que Él dijo sea ejecutado. Que nuestro Señor Jesucristo los bendiga.
Gracias una vez más, hermano @HiroYamagishi por compartirnos este espacio.
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