Hola mis queridos amigos, hoy quiero hablarles de un tema que en la actualidad abunda mucho en nuestras conversaciones y que respecto a nuestra salud es preocupante.
El Estrés
Un término demasiado utilizado
Desde que este término pasó a formar parte diaria de nuestras vidas, ha perdido rigor y precisión científica. El uso indiscriminado de este vocablo, ha contribuido a desautorizarlo y convertirlo en un sinónimo de prisa, fatiga, agitación o inconvenientes. De hecho científicamente se ha pensado en utilizar otro término que no sea tan utilizado y que se identifique con la población científica.
Entonces…
¿Qué es el estrés?
Fuertes estímulos psicológicos como fisiológicos, que pueden causar en un individuo un síndrome llamado: síndrome general de adaptación (Hans Selye)
El estrés forma parte de nuestras vidas, del día a día y lo podemos experimentar en mayor o menor grado. De hecho se considera una respuesta natural de nuestro organismo, como tener sed, calor, apetito, etc. El estrés nos permite que nos adaptemos a los cambios en nuestra vida, por ejemplo cuando vamos a una entrevista de empleo nuestro ritmo cardiaco se acelera, nos volvemos sudorosos, ansiosos y preocupados. Esto se puede presentar al iniciar en un empleo nuevo, en una competencia, en una evaluación etc.; hasta que nuestro organismo se adapte a dicha situación y así ocurre con todo. A largo plazo vamos ganando confianza en nuestra nueva situación hasta que nos adaptamos por completo y ya deja de preocuparnos.
Muchas situaciones cotidianas nos genera estrés por pequeña que sea: conducir un auto, cuidar de nuestros hijos, defendernos ante una situación injusta, presentar un examen, son tareas que precisan un grado de alerta y activación y en la que el estrés es necesario. Pero no es necesario preocuparse o alarmarse, nuestro organismo se encuentra preparado para esto. Debemos preocuparnos cuando las respuestas se mantienen por un tiempo más prolongado originando un daño en nuestro sistema, apareciendo consecuencias negativas.
Entonces podemos comprender con esta explicación que existen dos tipos de estrés:
- El estrés positivo o eustress, que es un proceso de adaptación inocuo y
- El estrés negativo o distress, que es donde se aprecian alteraciones en nuestro organismo afectando nuestras vidas.
Es importante tener en cuenta dos factores: la situación que provoca estrés y la reacción de cada individuo. De allí la frase: “aprende a vivir con tu estrés”.
Hoy en día la persona y el entorno se influyen mutuamente para ocasionar estrés, pero de cierto hay, que cada persona reacciona de una forma distinta, unos más controlados y fuertes, otros más débiles.
En resumen, el estrés:
- Es una respuesta natural de nuestro organismo
- Requiere un proceso de adaptación
- Depende del entorno
- Varía según nuestra interpretación.
- No es una enfermedad, según como lo llevemos y nos adaptemos
¡Don’t worry, be happy!
Espero que esta información le sea de mucha ayuda para aprender a controlar nuestro estrés y saber que cada día tendremos algún estrés por aquí y otro por allá. Pero permitamos a nuestro organismo a adaptarse a las situaciones de cada día, sin alterarnos y mucho menos enfermarnos.