A cuatro décadas y un año del siniestro que prueba que todo en la vida es causal
La ley de Murphy se patentó claramente aquel 27 de marzo. Era domingo y todas las casualidades confluyeron…
Dos gigantes del aire mancharon ese domingo el cielo de islas Canarias. ¿Fatalidad común? ¿Impericia? o simplemente el hado sombrío arropó con sus alas amortajadoras quinientas ochenta y tres (583) almas, una pequeña babel del destino que confundió las cabinas.
Solo trece segundos bastaron para arrasar con el Boeing 747 de Pan American World Airways y KLM Royal Dutch Airlines, uno procedente del Aeropuerto Internacional John F. Kennedy, en Nueva York y otro que había despegado desde Ámsterdam.
¿Pero sabias que ninguno de ellos, tenía previsto inicialmente aterrizar en este aeropuerto? ¿Mala suerte? ¿Destino premeditado? lo cierto fue que una cadena de errores, condiciones meteorológicas adversas, decisiones humanas erróneas, fallos técnicos; e incluso un atentado terrorista ese mismo día en el aeropuerto de Gran Canaria desencadenaron este brutal accidente, que marcó un antes y un después en las normas de seguridad de la aviación.
Una cadena de eventos desafortunados causó la catástrofe ¿cree usted en premoniciones? pues aunque ese amaneció despejado y con un sol estupendo, a eso de las dos de la tarde una gran niebla invadió el silencio de Tenerife, un poco más tarde producto de los ánimos caldeados los insurrectos del movimiento de autodeterminación Canario (Mpaiac) hacen estallar una bomba casera en una floristería cercana al aeropuerto de Gando, Varios vuelos que se dirigían ahí habían sido desviados a la isla vecina de Tenerife y tan solo esperaban la oportunidad de seguir a sus destinos que fueron truncados de un plumazo de nubosidad, fuego y fatalismo.
Hay quienes creen en la casualidad. Sinceramente pienso que todo en la vida es causal ¿o fue casualidad que un veterano y extremadamente experto piloto holandés, el capitán Jacob van Zanten acelerara motores y tratará de “despegar sin autorización? ¿Es pura casualidad que las torres de control no se percataran de ambos jumbos en la pista? ¿Acaso es casualidad que justo cuando los dos aviones se estaban moviendo, el tiempo cambiara dramáticamente y la pista comenzó a llenarse de niebla?
Una gran explosión seguida por una enorme bola de fuego y un atronador cañonazo de sangre y llanto se escuchó en toda la isla. Un fuerte mandoble golpeó la cola del avión, la tapa de la cabina había desaparecido, el ala izquierda del avión como un cóndor mutilado dejaba ver a unos 40 pasajeros aterrados que lograron escapar del siniestro y aunque desorientados y temblorosos como topos a flor de luz salvaguardaron sus vidas.
Dos aviones en llamas en la pista. Cientos de cuerpos calcinados, gritos, dolor y llanto por doquier. Miles de preguntas sin respuestas. Otro “Titanic” pero del aire que se hunde en una maraña de pretextos sinuosos…
¡Hay una única verdad! Las cartas sobre la mesa, aun la mayor perfección del hombre es hecha trizas por la poderosa voluntad divina
Sin rodeos: “nadie puede escapar de su destino” que lo diga Robina van Lanschot única superviviente del vuelo holandés siniestrado hace 41 años, quien se libró del zarpazo de la muerte porque una “corazonada” y el impostergable deseo de ver a su perro le dio otro billete para el vuelo de la vida.
Muy buena historia @perseverancia, me enganchó desde el principio.
Congratulations @perseverancia! You received a personal award!
Click here to view your Board
Congratulations @perseverancia! You received a personal award!
You can view your badges on your Steem Board and compare to others on the Steem Ranking
Vote for @Steemitboard as a witness to get one more award and increased upvotes!