Muy buenos días. Estamos en un mundo cuyo príncipe es el enemigo y en él se libra una batalla entre el bien y el mal, habiendo bajas de este lado como en todas las guerras. No se nos ha prometido que seremos librados del sufrimiento y de la muerte; la vida eterna es en el mundo venidero, como bien lo señala el hermano Elí. Es una situación que produce mucho dolor, sufrimiento y angustia, no es nada fácil pasar por esto, pero tenemos la esperanza de que todo dolor, lágrimas y la muerte misma será vencida finalmente cuando Dios renueve todas las cosas en la Tierra Nueva.
Bendiciones.