Cuando cedemos a la tentación, Dios no oirá nuestras oraciones. satanás sabe eso, y esta es una razón por la cual trabaja tan duro tentándonos para que pequemos. Para vencer la tentación, no se debe hacer caso a los deseos de la carne. Esto quiere decir que no debemos hacer cosas o permitirnos entrar en situaciones en que sea fácil pecar.
You are viewing a single comment's thread from: