Su lengua saboreando mis senos se sentía tan bien, estaba entregada a sus caricias, mientras sonidos vergonzosos abandonaban mi boca, aquello era otra cosa, nunca pensé que se podría sentir así de bien – AHH… - tape mi boca avergonzada– no calles tu voz MIa – la voz ronca de Cesar inundo mis oídos mientras sus penetraciones se hacía cada vez más rápidas, su agarre en mis caderas era fuerte, su sudor bañaba su bello rostro – Ahh… - la succión en mi seno derecho era exquisita, pero quería más, deseaba más, enrolle mis piernas en las caderas de Cesar, pegándolo más a mi cuerpo, mientras mis manos las lleve a la cabeza de Elena, pagando mas su boca a mis senos ¡dios era la gloria! Mi cuerpo se arqueaba por las sensaciones que estaba experimentando, nunca había hecho aquello, pero no me arrepentía, mi cuerpo temblaba, vibraba porque aquello fuera más rápido, el frenesí se estaba apoderando de mí, los dedos de Cesar entraron en mi boca, explorando todo a su paso, la saliva chorreaba por todo mi cuello, los jadeos salían si poder evitarlo. En un rápido movimiento Elena puso se sexo frente a mí, abriéndolo con sus manos – usa tu lengua – lo haría? Realmente lo haría? Jamás lo había hecho, así que mande al diablo todo y aproxime mi lengua a su entrada dilatada, estaba humada, pase mi lengua saboreando su salina esencia, tome sus caderas para acercarla más a mí, mi nariz olio su exquisito olor, impulsando mi ser, succione su clítoris como si mi vida dependiera de eso, podía sentir el latir del mío que se llenaba, se hacía gordo – ¡Oh si! … ¡AHÍ!...más fuerte – aquello me impulso a meter dos de mis dedos en su entrada, según lo que había leído debía presionar hacia abajo y …- AHH!! – su jugo amargo lleno mi boca, al mismo tiempo en que yo convulsionaba al sentir la semilla de Cesar ligada con la mía, el placer nublaba mis sentidos, mi cuerpo caía exhausto en la cama, mi respiración estaba agitadas después del post-orgasmo que acaba de experimentar, el sexo entre tres entraba en mis lista de favoritos.
-Gracias por el rato chicos – escuche a Elena, después de un rato, esta se estaba vistiendo – tengo trabajo así que… nos estamos viendo – se acercó dejado un casto beso en mis labios, ruborizándome por el acto – seguro – respondió Cesar después de besarla, el sonido de la puerta nos avisó que estábamos solos nuevamente – Satisfecha amor? – pregunto Cesar con una sonrisa en los labios – completamente – sonreí, antes de escuchar como sonaba el teléfono – que bueno… ahora a trabajar – abandono la sonrisa para poner su rostro serio, imitando su acción me levante, vistiéndome en el proceso, tomando las armas que estaban en el armario – parece que el lugar del duelo será en la playa – me dijo mientras leía su móvil – perfecto, se nos da de maravilla luchar en el agua, acabaremos con el rastreador en dos por tres – salimos tomados de la mano, el vecindario esta desierto, ni un alma se veía, supongo que era normal al ser las 3 de la mañana. Cuando llegamos nos metimos al agua sin pensarlo, compartimos un beso y al separarnos vimos en la orilla que el rastreador había llegado, mayor sorpresa fue ver a Elena allí, esta también estaba sorprendida, sonrió y se adentró en el agua, un segundo round estaba por llegar, mi parte baja palpito de la emoción.
Gracias por leer. Att: La orgullosa numero 1
Es el primer relato que leo en esta comunidad. Y qué bueno es.
Gracias por darle una oportunidad que bueno que te gusto
Amig@ realmente me atrapo tu relato, comence a leerlo y no pude parar asta terminarlo, esta muy bueno mi imaginación voló como si lo estuviera viendo, felicidades
Me alegra mucho que te gustara, el que te atrapara me dice que no esta ya mal después de todo gracias