Cada partido de Liga del Madrid vuelve más aterrador al PSG. El equipo de Zidane se repitió a sí mismo: falta de concreción en ataque, un repliegue de verbena y una desatención penalmente perseguible. Este domingo puede dormir, y no a pierna suelta, a 21 puntos del Barça. Andar así por la Liga sólo puede acabar en catástrofe en Europa.
cortesia as.com