Julio siempre decía que su Renault Mégane amarillo era su gran amor. No por capricho, sino porque aquella coupé había sido su compañera de ruta durante años. La compró cuando todavía soñaba con recorrer Argentina de punta a punta, y aunque la vida nunca le dio tiempo para tanto, cada curva que tomaba en la autopista se sentía como una pequeña victoria.

Pero ahora, la realidad le presentaba un desafío que ni el motor más potente podía esquivar: su salud había dado un giro inesperado, y el tratamiento contra el cáncer exigía una inversión que sus ahorros ya no podían sostener. Vendérselo significaba renunciar a una parte de sí mismo.
El día que decidió publicarla en venta, la lavó con más dedicación que nunca, repasando con nostalgia cada marca en la carrocería. Ahí estaba el rasguño de aquel viaje a Bariloche, el leve desgaste del volante que tantas veces había sostenido con fuerza en noches de tormenta. Como despedirse de un viejo amigo.

Los compradores comenzaron a llegar. Algunos la querían solo por el rendimiento, otros preguntaban sobre el consumo. Pero fue un joven, Ricardo, quien entendió la historia detrás de la pintura brillante.
—Parece que este auto significa mucho para usted —comentó Ricardo, notando la manera en que Julio miraba la coupé.
—Más de lo que cualquiera podría imaginar. Ha sido testigo de mis mejores momentos —confesó Julio.
Ricardo escuchó, dejó que Julio hablara. Al final, no negociaron el precio. Entendió que aquello no era solo una transacción, sino una despedida.
Días después, mientras el dinero por la venta se transformaba en medicina y esperanza, Julio recibió un mensaje. Era una foto de la coupé, ahora con Ricardo al volante, recorriendo un camino costero bajo el sol radiante. "Prometo cuidarla como usted lo hizo", decía el texto.
Julio sonrió. Había dejado ir algo valioso, sí, pero al final, lo más importante era seguir adelante. Porque, como descubrió aquel día, algunos viajes no terminan; solo toman nuevos conductores.
Foto(s) tomada(s) con mi smartphone Samsung Galaxy S22 Ultra.