Saludos amigos, hoy comparto con ustedes un icono de México, que desde su creación a tenido una gran difusión no solo en ese país sino también en el mundo, principalmente fue creada como una crítica a un sistema social y luego fue evolucionando hasta ser la imagen que representa el Día de Muertos.
Origen
![](https://images.hive.blog/768x0/https://cdn.steemitimages.com/DQmPf6FfGWyr8MMhFD1aEoqTTRQe6FvgXXukNct8uvX35AU/%C2%BFCu%C3%A1l-es-el-origen-de-La-Catrina-770x413.jpg)
![la-catrina-de-jose-guadalupe-posada-periodico-high.jpg](https://images.hive.blog/768x0/https://cdn.steemitimages.com/DQmZszWN7g5TL1HU93sS1cQZuJLUx8H89g9ab54btMCpQA8/la-catrina-de-jose-guadalupe-posada-periodico-high.jpg)
Ilustración
Jose Guadalupe Posada
José Guadalupe Posada (1852-1913) fue un célebre grabador, caricaturista e ilustrador que colaboró en medios como El Padre Cobos, El Ahuizote y La Patria Ilustrada. Sus críticas sociales que evidenciaban situaciones de desigualdad e injusticia en el país y en la sociedad porfiriana, le hicieron famoso además dentro del arte popular por sus dibujos de “calacas”; las calacas o calaveras ilustraban corridos, historias de crímenes, a políticos, damas, toreros…
Es por ello que sus calaveras, bautizadas en un principio y por él mismo como “La Calavera Garbancera” representan al pueblo, a su carácter desenfado y festivo, y a la situación de la época, aunque hoy se les asocie más al día de muertos. El garbancero era aquel comerciante que a pesar de tener sangre indígena pretendía ser europeo y renegar a su propia cultura; situación que a Posada no le agradaba. Por ello, su calavera con sombrero, sin nada más, representa al garbancero: al que pretende aparentar lo que no es.
Obra
Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central
Autor
Diego Rivera
La influencia de la obra de Posada le llegó posteriormente a Rivera, quien re-adaptó el concepto, la bautizó como Catrina, como anteriormente menciono, y le añadió nuevos atributos, ropa, porte y elegancia, como se puede ver en Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central, convirtiéndola en Catrina.
Hoy en día, la Catrina sigue siendo una invención popular y ha salido de los límites del lienzo o el grabado para ser parte de la cultura viva mexicana, de sus usos y costumbres. Parte de "lo mexicano" y de su posición frente a la muerte. La observa, se la acerca, la hace parte de su entorno, de su arte y es una artesanía que simboliza el mestizaje. Se ha vuelto artesanía que resalta la riqueza formal y espiritual del país.