Con razón te enganchaste con el artículo, si es que no tiene desperdicio. Aquí la palabra clave es compromiso. Primeramente el compromiso hacia nosotros mismo en reconocer nuestras habilidades y las actividades que nos gusta hacer. Luego, el compromiso de nosotros hacia los demás porque, hagamos la labor que hagamos, siempre estamos realizando algún servicio que de alguna manera beneficia a otros. En ambos casos nuestro nivel de compromiso incidirá directamente en el éxito de lo que nos propongamos a hacer y en la satisfacción del logro cumplido.
Por otra parte, en muchos casos es la bendita zona de confor o el miedo a arriesgarnos lo que nos limita y esto, por muchas oportunidades que tengamos a nuestro alcance, no nos permite estar lo suficientemente motivados para aprovecharlas