Ríete y ríete mucho.
Ríete de mi ropa,
ríete de mis botas.
Ríete de mis dedos,
y también de mis espejuelos.
Ríete de mi cabello,
porque no hay otro igual.
Ríete de mis dientes,
que ya los verás más.
Ríete de mis labios,
esos que no besarás.
Ríete de mi cuerpo,
aquel que no tocaras.
Ríete como nunca,
ríete hasta mañana.
Ríete para siempre,
pues yo también sé reír.
Quizás no ría contigo,
ni de tí ni de mí.
Pero algún día lo haré,
y espero hacerlo después,
porque quien ríe de último,
ríe mejor.
Gracias por compartir y reir con tu bello poema @yenniferdgz. Te di un voto