Mi vida como Maniquí viviente, algunos podrán interpretar una estatua viviente, de esas que en algún momento hemos visto curiosamente en alguna plaza o calle de alguna ciudad en cualquier parte del mundo.
Descubrí la primera estatua viviente, en la ciudad de Mérida Venezuela, era un joven argentino que venía viajando de mochilero, tratando de alcanzar Europa.
Pasaron los años y empezaron a aparecer con mas frecuencia en algunas calles y boulevares de Caracas. Yo me lancé a esa divina aventura por los años 2004, interpretando a una estatua viviente que recreaba una joven de 1800, con un traje entallado como en la época de Napoleón, pues este traje rompía con el corsé y liberaba a la mujer nuevamente, inspirados en Grecia.
yo me interesaba por el vestuario y este era una buena forma de enseñar la historia del traje o interpretar un teatro en silencio con otros códigos de comunicación.
A parir de allí comenzó una linda experiencia y un largo y amplio camino. la creación de un taller de formación y la organización de otras maniquíes vivientes, para poder narrar la historia de la moda del siglo XIX, a través de Maniquíes vivientes.
Una linda e interesante investigación, que me hizo explorar en otros países, sobre estatuas vivientes, la historia del vestido y las muchas posibilidades que tenía este arte. participante en eventos con otras estatuas en Uruguay y Argentina.
el trabajo de vestuario y Maquillaje es creación propia, si deseas apoyar vota.erikavintag@ y siguenos por steemit