Ese ladrón que nos roba nuestra tranquilidad no es otro que la preocupación. Y no solo nos quita el sosiego, sino la alegría, la energía y hasta la salud. Preocuparnos significa ocupar anticipadamente nuestra mente y sobrecargarla con pensamientos que, generalmente, no son positivos.
Preocuparnos nos sobrecarga de temores infundados y anticipaciones de contrariedades que aun no existen. Las preocupaciones funcionan dentro de nuestra cabeza como los espejismos en el desierto, solo que, en vez de imaginar oasis donde aliviar nuestra sed y reposar, nos inquietamos llenándonos de amarguras y malos augurios.
Un prestigioso medico aseguraba que la mitad de las camas de los hospitales estaban ocupadas por personas enfermas de preocupación. Las preocupaciones o ansiedades son un pésimo habito para nuestra salud y constituyen lo que se conoce como una "anti-actitud"; es decir, todo los que nos paraliza y detiene en lugar de activarnos hacia el logro de nuestras metas, cualesquiera que estas sean (y recuerden que ya hemos insistido en que no hay meta ni sueño ni idea pequeña).
La ansiedad o preocupación nos agota emocional y físicamente, deteriorando las relaciones importantes de nuestra vida: padres, hijos, pareja, amistades, colegas.
La preocupación desemboca en:
- El estrés.
- En caos extremos.
- Degenera en afecciones cardíacas.
- Ataca nuestro sistema inmune.
- Insomnio.
- desorden alimenticios.
Lo que pretendo decir es que debemos insistir en desterrar la preocupación de nuestra vida, ya que nos desestabiliza profunda y gravemente, con consecuencias imprevisibles a corto, mediano y largo plazo. El temor a la perdida (de vienes materiales, de un empleo) o al abandono (par parte de seres queridos) la causa mayoritaria de preocupaciones.
La preocupación en singular, y las preocupaciones, en plural, nos desvalijan los valores mas importantes de nuestra existencia. De allí que sea imprescindible combatirla, sin darle tregua alguna, recordándonos nuestros propósitos de vida, nuestros objetivos y metas, con una actitud positiva.
De esta manera desactivamos la energía negativa de la preocupación y ya veremos si resulta tan impertinente como para tocar de nuevo nuestra puerta. Cuando ello ocurra, estaremos preparados para desinflar sus efectos perniciosos.
¡Que así sea!
autor: Linda Duque.
un buen mensaje y una tremenda reflexión para los momentos difíciles hermano...
la idea es que llegue el msj hermano!
Hola, ricardojmb, muy interesante tu post sobre algo que nos afecta a todos. Yo utilizo la resiliencia en estos casos y esto depende de nuestra actitud ante la vida. Upvote.
gracias amigo, en mis post anteriores también se habla de las metas y los objetivos en la vida que es muy importante tener es siempre presente. saludos!
This world is full of tension we should stay calm and be positive
A good blog keep it up
thank you!
Prestamelooo chamooo
chamoo lee los post jajaja
This post has received a 2.64 % upvote from @boomerang.