TOXICO
El teléfono suena por quinta vez en el día. No hace falta que eche un vistazo al nombre que aparece en la pantalla. Sé quién es, sé qué quiere, sé las repercusiones que puede tener en mi relación. Es mi madre. La última vez que contesté frente a mi esposo las cosas no terminaron muy bien que digamos. Ella insiste en algo que no quiero, ni puedo hacer. ¿Cómo podría terminar algo en lo que se ha basado mi vida? Más de 10 años de relación, desde el instituto, la universidad y ahora la convivencia familiar. Somos el uno para el otro. Él tiene razón., no debo permitir que terceros se metan así sea mi propia madre, quien siempre tiene comentarios negativos. Las parejas atraviesan momentos bajos y altos. Siempre oscilamos de un extremo al otro. Es completamente normal.
El móvil suena por sexta vez. No presto atención. No necesito uno de los fantásticos consejos de mi madre sobre salir adelante por mi propio camino. Lo estoy haciendo, claro que sí. No suelo ir al cine como antes, pero al menos vemos películas en casa. Tampoco frecuento McDonalds porque mi esposo sufre del colesterol y no quiero que se sienta mal, pero de vez en cuando logramos comer uno de esos platos que tanto le gusta. Tuve que dejar de ir a las clases de yoga porque se cruzaba con la hora en las que él llegaba de trabajar, pero trato de hacer un poco cuando me dispongo a ir a la cama.
Séptima vez que escucho el timbre predeterminado del móvil. Asomo la vista y veo que esta vez no es mi madre, es mi mejor amiga. Hace tiempo que no hablamos. Solíamos ser inseparable, pero desde que mi esposo descubrió que compartía en redes sociales imagenes sobre hombres guapos, artistas famosos, y me los enviaba al privado, discutimos muy fuerte sobre si era una buena influencia para mí. No veo nada de malo en ello, pero no quiero una nueva discusión, estoy cansada. Todas las noches era un vendaval de gritos en el cuarto, la sala, la cocina. Grosería se intercambiaban de red a red como una pelota de voleibol y no era bueno para nuestros intereses. Así que tomamos la mejor decisión posible: alejar las redes sociales.
Octava sonata. Estoy cansada, quizá debería apagar el celular. Pero no puedo. Mi esposo quedó en avisarme para ir a una cena con el jefe de su departamento. Es una oportunidad muy grande para él en el ámbito laboral. No me siento muy bien, y pretendía quedarme todo el día en la cama, pero inesperadamente avisó que tendríamos que salir y necesitaba tener el mejor rostro posible para dar una buena impresión. Me arreglé como pude, tomé una ducha, y estoy en la sala esperando que diga el momento en que me va a venir a buscar. Hago el mejor esfuerzo posible por no defraudarlo.
Novena sonata. Sigue sin ser él. Es mi padre, quizá mi madre le mandó la orden de llamarme para así poder hablar con ella. No quiero, no lo deseo. Una charla con ella es lo último que necesito. Siempre terminamos hablando sobre cómo he dejado de ser yo misma para convertirme en lo que él quiere. No soy el reflejo de todos sus deseos. Soy lo que soy porque lo he querido, ni más ni menos. Quiero estar con él, quiero que esto funcione. Es la única verdad en el asunto. No las patrañas de mi madre, no las insistencias de mi mejor amiga, no las alcahuetearías de mi padre.
Décima sonata y ahora sí es él. Contesto y oigo su voz al otro lado del móvil. Suena seco y disgustado. Trato de mantener el mejor tono de voz posible sin caer en provocaciones innecesaria. Me pregunta si me veo bien, como a él le gustaría, contesto que sí, en broma añado que siempre me veo bien, él suelta una risa irónica. Pregunta si me he puesto uno de los vestidos que me compró para estos momentos, lo pienso un segundo y me animo a responder que no, que lo he elegido de mi propia galería. Un silencio incomodo cubre los lados y juro que noto una chasqueada de lengua acompañado luego de un 'Bueno, no hay manera, ya es tarde'. Siento que todas mis defensas se vienen abajo, pero soporto la carga.
Cuelgo el teléfono cuando informa que en quince minutos pasará por la casa, y no hago más que soltar una lagrima que no arruine mi maquillaje del todo porque sé que está molesto y las cosas no saldrán bien.
Continuará.
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Hola, este post ha sido votado por Cervantes, en conjunto con Steempress. Saludos
Gracias!!!
Esperando la segunda parte, quedo muy bueno....
Saludos @pedrojesuss