Este día estuvo lleno de una gran lección y reflexion para mi hija y para mi...La abuela le prestó una pequeña taza de porcelana a mi hija de 8 años para jugar a la cocinera. Accidentalmente la taza se partió y el susto de mi hija fue grande, pues temia que su abuela se molestaría y la regañaría. Cuidadosamente escondió todas las piezas y esperó hasta las 6 de la tarde cuando llegué del trabajo para que pegara la taza de porcelana
Hay cosas que se resisten a ser reparadas...
A penas me desocupe comenzamos a pegar las piezas, ella se esforzó para que las uniones no se notaran, pero se fue la luz y tuvimos que dejar todo porque no veiamos. inexplicablemente el gato se subió al mesón de la cocina y tumbó la taza..¡Que terrible! ahora ya no eran 6 piezas por pegar sino como 15 o mas... nos dió mucha tristeza...yo me decepcione de la idea de pegarla pero mi hija me insistió porque ella quería conservar la tacita como recuerdo de su abuela, aunque ella no se la habia regalado, asi que acepté pegar todos esos pedacitos de porcelana.
Se hizo muy de noche y aun no había llegado la electricidad, nos quedamos dormidas pero me lavanté a las 4:00 am de la madrugada a comenzar a pegar la taza, pero para continuar se necesitaba esperar que secaran algunas partes, me acosté de nuevo a las 5:00 am y a las 6:00 am continué pegando.
A las 7:00 am mi hija se despertó, al ver mi avance no le gustó mucho el acabado porque ella no queria que se notara que se habia partido... sin embargo haciamos lo mejor posible.
Llego la hora de irme al trabajo y ella recogió todo del mesón para guardarlo y que la abuela no se diera cuenta, mientras caminaba a su cuarto la taza se le cayo de nuevo... mi hija me miro con una cara de susto,,, yo me molesté mucho con ella, y salí enojada de la casa, ella fué detras de mi con lagrimas en los ojos a insistirme que la ayudara a pegar la taza. Eso me conmivió y me devolví y comence de nuevo.
La verdad nos liberta... y nos saca de dificultades.
Le pedi que dejara todo sobre la mesa que al llegar del trabajo continuariamos. Le expliqué que lo mejor era decirle a la abuela lo ocurrido...
Juntas fuimos a hablar con la abuela y ella amorosamente comprendió lo ocurrido y no se molestó con ella... Mi hija tiene la mejor abuela del mundo.
Perdí la cuenta de cuantas piezas pegamos... pero este dia me dejó varias lecciones para aplicar en muchas situaciones de mi vida:
- Lo que se rompe puede reparase si mantenemos la voluntad de querer arreglar las cosas. Esto lo podemos aplicar a las relaciones rotas.
- Cuando algo se rompe siempre quedaran huellas por mas que intentemos disimularlas estan alli y es nuestra decisión asumirlas.
- La verdad nos liberta de amargas dificultades...