Muy buen punto, y te agradezco de corazón tu reflexión. Venezuela necesita y los Venezolanos necesitamos tanto, que casi cualquier cosa en positivo aliviará nuestro tormento...
Lamentablemente, seguimos desorientados, desunidos, temerosos, en conformismo disconforme, sin esperanzas, ni fe y esperando que otros nos hagan las tareas pendientes; y más triste aún, cuando alguien sale y alza la voz o intenta hacer que tomemos conciencia por nuestros derechos, de inmediato desconfiamos en esa persona y lo dejamos solo para que se lo coman las hienas de la mafia enquistada en el gobierno... Saludos.