En los últimos meses/años Venezuela ha estado pasando por una de sus más fuertes crisis económicas y en consecuencia, en importantes conflictos políticos y sociales que han empujado al ciudadano común a armar sus maletas y prepararse para un largo viaje al exterior sin boleto de retorno.
Es así como ya en muchas ciudades del mundo, especialmente en países vecinos de Venezuela la migración venezolana ha ido en ascenso, desarrollando a su vez malestar en esas latitudes.
Muchos se han ido profesionales, técnicos, amas de casa, estudiantes, vendedores informales... Muchos, la mayoría han representado el tricolar de forma excepcional otros lamentablemente se han encargado de ensuciar el nombre de esta tierra, exportanto antivalores y prácticas deplorables que han hecho que tilden al resto de los venezolanos en el extranjeros de gente indeseable e incluso "plagas".
A ellos, que nos tildan a los venezolanos de "indeseables" y de "plagas" les digo lo siguiente: nosotros no somos personas con una cultura destructora, somos gente de bien, de respeto y solidaridad. A muchos se les acogió cuando el resto de América Latina sufrió de terrible crisis al igual que nosotros (hiperinflación, dictaduras por ejemplo) y este maravilloso país a todos les abrió las puertas. Recuérdenlo siempre colombianos, peruanos, chilenos, ecuatorianos... a muchos se les dió vivienda y la nacionalidad de este tricolor, así como trabajo, fueron integrados a nuestras celebraciones sin discriminaciones, a nuestros bailes, formaron parte de nuestros colores.
¿Por qué se olvidan de eso? La mayoría de los venezolanos acuden a sus países a trabajar, a luchar a crecer. Desean dar lo mejor de sí para su nuevo país de residencia, para ellos mismos y para sus familias. Nadie quisiera dejar un país tan hermoso como este, con picos de nieves perpetuas, médanos, playas de arenas blancas y aguas cristalinas, selva, llano, música, encantos. Es muy dificil dejar atrás a la tierra de la magia de Doña Bárbara, la que inspiró a Simón Diaz en sus canciones y vió nacer a Simón Bolivar impulsandolo a su lucha emancipadora en nuetsro continente.
No juzgen tan a prisa, recuerden que todo en la economía es un ciclo, a veces se esta en la cúspide, pero otras veces se puede estar en el fondo. A mis compatriotas les digo que luchen, respeten a la nueva cultura que los acoge, trabajen duro, representen a Venezuela con todo el corazón y si se encuentran aun en este bello territorio les digo que no desmayen, sigan batallando, por favor no se acostumbren a estar rendidos, siempre mantengan la esperanza, pronto volverá a brillas esta tierra bendita, más fuerte y más triunfante que nunca, falta poco. Gracias.