Una de las preguntas más difíciles de hacerse es: ¿cómo será mi vida sin él o ella?
Y es que la vida no viene con instrucciones que te enseñen como superar la falta de alguien. Los psicólogos hablan de un año de duelo, lo que equivale a 365 días, pero será que no saben que tienes toda una vida llena de recuerdos.
Conocí una chica que vivía una vida de constantes cambios, la relación de sus padres era bastante frágil y ella era la afectada, ella nació en una ciudad muy pequeña allí creció, pero no recordaba mucho de ella ya que su madre se la llevaba muy lejos de allí por semanas y a veces meses sin importarle quien fuera el afectado, y esto adivinen, a causa de su mala relación.
Esta chica de las que les hablo aún era un pequeña y no entendía nada de esto, pero algo dentro de ella cambia sin que nadie se diera cuenta.
Inseguridad, tristeza, rechazo, resentimiento. Y aunque no es exactamente perder a una persona querida, ella en cada viaje dejaba morir a una parte de si, y con ella morían bonitas experiencias, amigos, etapas importantes que sin duda no recuperaría.
Perdía su infancia, y hasta parte de su adolescencia se fue en estas travesías egoístas.
Ya eso no era solo un año de duelo, sino una gran cantidad de su vida desperdiciadas a causa de algo que ella no planeo, cosas que no podía controlar, circunstancias de la vida que para simplificar están destinadas a ella.
Quien los saca de eso? Su padres no se darán cuenta?
Hay cosas de la vida que no nos toca elegir como nuestros padres, o la época que nos toca vivir, que tal si mencionamos el abandono, pero no me refiero al amoroso o el que se hace como acto inconsciente. Ahora quiero hablar de tener que alejarte de tu vida para conseguir una vida mejor.
Existen millones de personas que se encuentran en esta situación, muchos gobernantes que acaban con un país sin sabes las repercusiones. Y es que la persona que tiene la oportunidad de irse a buscar una mejor vida en otro país lo hace.
¿Y saben porque?
Porque la vida se le está yendo y no esta haciendo nada para vivirla como merece.
Porque eres profesional y nadie lo valora.
Porque con su trabajo solo le alcanza para comprar migajas.
Porque nunca tendré una casa, una familia.
Porque veo gente morir de hambre y no puedo hacer nada, porque si le doy de mi comida terminare como él.
Porque veo niños abandonados y comiendo de la basura.
Porque gente muere, consecuencia de no conseguir un medicamento.
Quedarse es una manera de morir, pero me pregunto ¿irse no lo será?
Dejar morir tus costumbres.
Si en un futuro esa familia de cinco integrantes decide marcharse, pero el destino te depara países distintos, ¿no es una forma de morir? Quizás no te alcance la vida para volver a tener lo que ya tenías, quizás reencontrarse con tantas personas que amaste será un hecho imposible.
Y es que probablemente no vuelvas a ver a ese amigo de la infancia con quien tanto compartiste, porque quizás muchos mueran por no poder tener las mismas oportunidades que tú. Porque muchos de ellos quizás se vayan y no puedas volverlos a ver por cuestión de trabajo, distancia o economía.
Creo profundamente en que los líderes deben pensar cien por ciento en el prójimo, EN EL SERVICIO. Porque en su mano puede estar la vida de millones de personas y hay cosas que afectan de tal manera que no las puedes revertir.
Lucha por lo crees!
No importa como lo hagas, pero hazlo.