Imagen de mi autoría: 3 minutos en Paint.
Estimado señor humor.
Tengo el atrevimiento de escribirle estas lineas con el fin de expresarle mi gran preocupación en cuanto a su desempeño en los últimos años. Ya que solo se ha dedicado a promover anti valores, a enaltecer el alcoholismo, la delincuencia, el abuso y a distraer falsa y efimeramente a sus seguidores, sin dejar ningún mensaje positivo ni constructivo. Al contrario crean un sentimiento de resignación, conformismo y decadencia extremadamente dañino para la salud mental de todos los que les siguen.
Considero que todo debe tener un balance y que debería tomar el ejemplo de su embajador Laureano Márquez. Al cual respeto y admiro mucho, es el único que hasta ahora ejerce la profesión con inteligencia y con conciencia del poder que tienen sus palabras. La gran mayoría de los funcionarios del humor son mas del montón, ya han agotado todas las combinaciones posibles de los mismos chistes viejos y todos van acompañados del alcohol y del mensaje: Esto es lo mejor no necesito nada mas que mi cerveza para ser feliz y no me importa si con mis acciones daño o molesto a mis conciudadanos.
Me parece que es hora de tomar medidas drásticas y que sus embajadores sean jubilados dejando paso a nuevos profesionales que tengan como principal objetivo; edificar construir y fortalecer los valores en la sociedad.
Si, sabemos que es muy difícil hacer que alguien se ria y piense al mismo tiempo. Pero eso se logra analizando, comparando si lo que se dice va tener alguna consecuencia mas alla de la risa, y si esa consecuencia es positiva o negativa. En caso de ser negativa se desecha y en caso de ser positiva se expresa.
Es fácil dedicarse a una mayoría sin detenerse a pensar si esa es la parte que realmente echa para adelante a un país o si por el contrario es la que lo estanca y lo atrasa.
Hay infinidades de chistes de borrachos, cuyo perfil nos encontramos todos los días en las calles. ¿Mera coincidencia?
Hay infinidades de chistes de Jaimito, personaje que paso de ser un simple cuento jocoso, cruzo desde su dimensión y se instalo en nuestros niños, hoy en dia tenemos niños insolentes que no respetan ni a sus padres ni las leyes ni a nadie y que en muchos casos terminan siendo delincuentes. Pero como eso es gracioso según el humor, no pasa nada no se corrige ni se educa. Es mas fácil enaltecerlo.
Me gustaría ver chistes sobre las personas que lanzan la basura en las calles, donde se haga mofa de ellos, y donde deje un claro mensaje de que eso no esta bien.
Otros sobre un personaje que no ahorra y se gasta el dinero en vicios, que deje como mensaje una gran curiosidad de como ser mas responsable y eficiente económicamente.
También de los ferreteros que venden “herramientas” y materiales de pésima calidad, que apenas se usan una vez se rompen y no dan ninguna garantía. Que nadie quiera verse identificado con ese ferretero ladrón y se sientan ofendidos si lo hacen.
Otros tantos de estos individuos que solo están al acecho, a ver de de que forma pueden aprovecharse de la buena fe de las demás personas. Aquí el mensaje final debe ser no hagas a los demás lo que no deseas que te hagan a ti.
En conclusión quiero decirle que, hace mucho perdí la capacidad de fingir la risa con los humoristas actuales, me encanta el hecho de pasar tiempo de alegría y sana diversión siempre y cuando tenga algún fin positivo o deje algún aprendizaje. Estoy seguro que habrán algunos cuantos que piensen como yo y que tengan las mismas preocupaciones planteadas en esta carta. Por ellos y para ellos me tome el abuso de escribirle estas cortas palabras, y esperando su respuesta. Aun que es poco probable me responda pues debe estar muy ocupado campaneando su vaso de licor mientras fuma un cigarrillo que luego lanzara encendido a la calle.