El fin de lo nuestro.
Hacía bastante tiempo que venia presintiendo el final de nuestros días, se que solo le dabas largas para no pasar por todo este dolor y sufrimiento, pero la vida da señales claras querida.
Y hoy cuando me citaste a comer a este restaurant y mandaste a traer una botella de champagne,
mi corazón no hizo mas que dal vueltas, había llegado la hora de la despedida.
Lo note por el pequeño tic que te da en el ojo derecho cuando estas a punto de hacer algo que te pone nerviosa. Lo note por que de soslayo vi el conejito de peluche que te regale en una esquina de tu cartera. Lo note por tus labios secos al yo intentar darte un beso.
Lo note por el silencio que hiciste cuando pregunte si tenia algo que ver con lo nuestro.
Y si que tenia que ver cariño, tenía mucho que ver, nuestro reloj de arena había acabado su tormento y esos labios secos fueron nuestro ultimo beso.