El dilema ¿Seguir o parar?. En ocasiones, llegamos a esta encrucijada por varias razones; es posible que nuestras metas no sean realistas, quizás estamos obsesionados con algo imposible de alcanzar o simplemente el ego nos asalta y solo deseamos que las cosas ocurran tal y como queremos, sin darle oportunidad a otros aspectos similares a lo que añoramos.
Sea cual sea el caso, siempre será saludable ser resilientes para poder sentirnos bien, pese a que no lleguemos a donde queramos. Tener sabiduría y humildad es indispensable para tomar ese descanso que ameritamos y replantearnos nuestras metas.
Considero que la vida es demasiado hermosa como para quedarnos viviendo en un círculo vicioso, así que hay que aprender a desprenderse de ilusiones vanas.
Me encantó tu publicación amigo, realmente contiene una excelente reflexión. 👏👏👏👏👏👏
Es así, hay muchísimas cosas hermosas en la vida como para quedarnos en circulos viciosos, de odio y todos esos aspectos negativos que no aportan nada a nuestra salud física y emocional. ¡Un abrazo!