Seguiremos rompiendo vasos, hasta que por edad ya ni siquiera toquemos uno. Es normal y es muy importante para crecer como humanos. Nadie vive sin cometer errores, pero nace un sabio cuando se aprende de ellos, o mejor todavía si se le saca algún provecho inmediato ( como vender el cristal 😂), pero si no puedes parar de repetir hacerlos, entonces de nada sirve un vaso rato. Saludos y bendiciones, y sin que se pongan celosos otros usuarios, esta ha sido una de los mejores puntos de vista que he leído relacionado a la iniciativa. Me llevo buenas enseñanzas de ello.