Hace mucho tiempo algo en nuestra vida pasaba. Perdimos algo o alguna cosa nació. Algo nos marcó y algo olvidamos.
He escrito este poema alrededor de esta idea. Un poema tal vez algo oscuro.
Pero sobre estas cosas también hay que hablar.
Espero la amabilidad de sus lecturas.
Érase una vez...
Presta atención, caminante nocturno.
En la esquina de tu mirada hay una danza de huesos.
¿Puedes verla?
El insomnio pone su pata de araña en tu corazón.
Mira en la caja de recuerdos:
Hay un niño feliz y alucinado que sonríe por el flash,
Con los ojos cerrados y los dientes tan blancos como las estrellas.
¿Qué le pasó a ese chico?
¿Dónde están los colores de la mañana y la canción saltarina de los grillos,
Y las ranas resbaladizas que atrapó en sus manos?
¿Dónde está la pantera que lo visitó en sus sueños
Como un antiguo dios brillante de sangre?
¿Qué pasó con el coraje, qué pasó con la gracia?
¿A dónde se ha ido el fuego de combate?
En el borde del silencio una historia se cuenta con voz rota.
Es una triste historia de arena y sal antigua,
Es una historia de cenizas en la boca...
Y dura para siempre.
Estuve leyendo tu poema en voz alta, varias veces, me gusta hacer eso, Adriana.
Mi gustò escuchar este poema de grillos y ranas.
Aunque como es mi mente de desordenada, luego de las cenizas en la boca, se me vino esa canción de Rubén Blades:
"Todo tiene su final
nada dura para siempre
Tenemos que recordar que no existe ternidad.
Como el lindo clavel quiso florecer, enseñarnos su belleza y su marchitó florecer....."
Enormemente agradecida por el apoyo, @sancho.panza. De igual modo, al prestigioso equipo de @cervantes. Es muy motivador.
Qué hermoso, hay veces que no nos damos cuentas como dejamos ir ciertas cosas con el paso del tiempo hasta que un recuerdo toca tu puerta y te das cuenta de que algunas cosas ya no tienen retorno.
Gracias por tu visita, @vivitinerante. Este poema se esribió desde la nostalgia, pero la osa es que ese es también el curso natural de la vida. Te sigo.
Totalmente. Yo también te sigo.