El problema de la valoración del trabajo propio y el cómo cobrar por los servicios, me hace recordar una cosa que era un clásico en la cuestión de la relación de la gente y el dinero, era sobre el viejo trabajo de Weber, "La ética protestante y el espíritu del capitalismo", en el asunto de que el conjunto de valores y la visión de la relación de la gente y el dinero, era un asunto que podría determinar el desarrollo de la sociedad.
Verás, en una concepción religiosa en la que se considera que 'ser rico' es malo o es contrario a la salvación del alma o que si se es rico se está 'ofendiendo a Dios', sucede que las personas tendrán una muy baja productividad, una relación negativa con la riqueza y una tendencia crónica a la pobreza. De allí que la concepción protestante de que la riqueza material se debía considerar como un 'reflejo del amor de Dios', me resulta revolucionaria, pues rechaza la idea de que Dios desea que la gente sea pobre y miserable, plantea más bien que Dios quiere derramar abundancia sobre su pueblo y bendice con riqueza a su gente.
En realidad, no soy muy religioso, pero me gusta más en este tema la perspectiva tradicional protestante que la visión tradicional católica.
Eso es todo @pedrobrito2004
De eso se trata, de malas concepciones y culpa.
De hecho, la culpa es la reacción emocional de inmediato.