“El grito eterno”
Lenguas de fuego en el cielo
visten de sangre las montañas,
el río sereno y cristalino,
ahora es una corriente
de aguas sombrías,
no es un atardecer cualquiera,
sobre el puente se encuentra un ser,
él es el causante de esta oscuridad,
transmite su angustia a quien lo mira,
se lleva las manos a la cabeza,
ya no soporta más sufrimiento,
a lo lejos dos personas
aguardan con temor,
su rostro deforme
me dice muchas cosas,
casi escucho su grito
que me atormenta sin cesar,
un grito que quedará atrapado
para la eternidad.
Escrito inspirado en el cuadro del pintor noruego Edvard Munch llamado "El grito".