Jajaja, me alegra que esa sea la percepción. Sin embargo, cada vez que me siento a escribir me siento como un niño en un examen, repasando en mi mente las fórmulas, las reglas y todas esas cosas, pero sobre todo tratando de no perder la naturalidad y el sentimiento... 😀
¡Muchas gracias por este apoyo tan bonito!