TREE STORY
English
Doesn't it happen to them that when they see an old tree they imagine for a moment all the history that could have happened during its long life? Of those trees that have already fallen but are still alive, sometimes hanging from precipices or deep in immense ancient forests . Well, I do start to think about that, what would they have to tell us if they could, the transformations of nature around them that humans also made, the families of different species that they could shelter among their branches and leaves.
Some lived through battles, entire wars and are still there while the fallen are remembered, generations can pass sometimes, but they are still there, literally firm, they are unique and each one of them really has a lot of value, for everyone around them and for all those who will arrive.
This reminded me of an old children's story that we were taught in elementary school, with a deep meaning about sharing and remaining a whole, being part of a community, that sometimes can be difficult, but even if we don't want it anyway We will continue to be part of it.
So I looked it up on the internet and this is what I found at https://muhimu.es/salud/el-viejo-arbol/
"THE OLD TREE"
One sunny morning a beautiful little bird decided to perch on one of the dry branches of an old tree. As the bird carefully cleaned its red plumage, he heard the tree lament:
- I feel so sad! I used to be beautiful and lush, now I'm just a bunch of brittle branches! Who cares about a tree that bears no fruit! Even the kids don't want to climb on me!
– Why so much misery? – asked the little bird to the tree.
– Well, you see, it's been more than two months since the owners of this house left and since that day I haven't tasted a single drop of water, if it doesn't rain soon I'm sure I'll die.
– Oh! So sad! I would like to help you, but I don't know how, I'm just a little bird.
– Do you think you can bring me even a splash of fresh water in your beak? – Asked the tree.
– Of course! – said the little bird – It's an excellent idea! I'm going to ask all the birds on the course for help and together we'll refresh you.
– Thank you very much birdie! – The tree exclaimed.
The pigeons, the mockingbirds, the goldfinches, the larks, and other local birds gathered in the river and, directed by the little red bird, carried water for the old tree in their beaks.
- Thanks! Thank you very much to all! How happy and alive I feel! – The tree exclaimed when, after a long wait, it was able to enjoy the rain that the little birds dropped on it.
Every day the birds watered the tree very generously. Little by little the old tree regained its color, thousands of leaves grew again among its branches and its trunk became stronger and stronger. All of it was again filled with beautiful and fragrant flowers that soon turned into juicy apples. So beautiful! The tree felt alive and lush again.
The beauty and presence that the tree gave to the patio where he lived caused the house to be inhabited again. Every day the lady of the house watered the tree and it was more and more resplendent. The happy birds for the arrival of spring and for the happiness of the tree decided to organize a party in the patio
- No! Don't stand on my branches! Please! – Said the tree to the little birds- Who don't see that they can throw away my leaves, my flowers and my fruits. Nobody likes dry trees. Find another tree to jump, there are many around this place.
The little red bird, along with the other birds, left very sad for the attitude of the tree whom they had helped so much.
The next morning a pigeon was trying to make its nest in the old tree. The very angry tree said:
- Hears! Don't you see that you can damage and dirty my branches and my trunk? There are many places where you can make your nest, why don't you look for another one.
The dove fled ashamed and saddened. The same thing happened with the goldfinch and calandria that tried to feed on the apples of the tree.
Little by little, the birds moved away from the patio and stopped visiting the tree. The tree continued beautiful and resplendent for a time; but each day he felt heavier. No one ate or threw away their apples. It had so many fruits and flowers on it that its branches and trunk began to lean. The lady of the house asked her husband to cut down the tree because at any moment it could fall.
The tree, which heard what the woman said to her husband, cried inconsolably. The birds heard her sobs and flocked to the patio.
What's wrong old tree? Why are you crying? – Asked the little red bird.
I'm very sad! I didn't let you throw my flowers, or eat my fruits, now my branches are so heavy that my trunk has bent and they're going to cut me!
– Do not cry, old tree, we are going to help you – said the goldfinch.
The birds began to throw the apples, the flowers and the leaves from the tree. Little by little the old tree straightened up and the lords of the house decided not to cut it down. Although for a time the tree only had a few leaves among its branches, it lived happily surrounded by little birds because it managed to understand the value of gratitude, service and generosity.
Español
¿No les pasa que cuando ven un arbol viejo se imaginan por un momento toda la historia que pudo pasar durante su larga vida?, de esos arboles ya caidos pero que un siguen con vida, a veces colgando de precipicios o adentrados en inmenzos bosques milenarios. Pues yo si que me pongo a pensar eso, que tendrian para contarnos si puedieran, la transformaciones de la naturaleza a su al rededor las que hicieron los humanos tambien, las familias de distintas especies que pudo cobijar entre sus ramas y hojas. Algunos vivieron batallas, guerras enteras y aun siguen ahi mientras los caidos son recordados, pueden pasar generaciones algunas veces, pero ellos siguen ahi, literalmente firmes, son unicos y realmente tienen mucho valor cada uno de ellos, para todos a su al rededor y para todos los que van a llegar.Esto me recordo a un viejo cuento de niños que nos enseñaban en la escuela primaria, con un significado profundo sobre compartir y permanecer a un todo, ser parte de una comunidad, que algunas veces puede ser dificil, pero aunque no lo queramos de todas formas seguiremos siendo parte de ella.
Asi que lo busque en internet y esto es lo que encontre en https://muhimu.es/salud/el-viejo-arbol/"EL VIEJO ARBOL"
Una soleada mañana un hermoso pajarillo decidió pararse en una de las secas ramas de un viejo árbol. Mientras el ave limpiaba cuidadosamente su rojo plumaje, escuchó que el árbol se lamentaba:
– ¡Qué triste me siento! ¡Antes era bello y frondoso, ahora sólo soy un montón de frágiles ramas! ¡A quien le importa un árbol que no da frutos! ¡Ni siquiera los niños quieren treparme!
– ¿A que se debe tanta desdicha? – preguntó el pajarillo al árbol.
– Pues verás, hace más de dos meses que los dueños de esta casa se fueron y desde ese día no he probado una sola gotita de agua, si no llueve pronto seguro que moriré.
– ¡Oh! ¡Que triste! Quisiera ayudarte, pero no sé como, sólo soy un pequeño pajarillo.
– ¿Crees que puedas traerme aunque sea un chorrito de agua fresca en tu piquito? – Preguntó el árbol.
– ¡Claro!– dijo el pajarillo – ¡Es una excelente idea!, voy a pedir ayuda a todos los pájaros del rumbo y juntos te refrescaremos ¡Ya verás!
– ¡Muchas gracias pajarillo! – Exclamó el árbol.
Las palomas, los cenzontles, los jilgueros, las calandrias, y otras aves del lugar, se reunieron en el río y dirigidas por el pajarillo rojo llevaron en sus picos agua para el viejo árbol.
– ¡Gracias! ¡Muchas gracias a todos! ¡Que feliz y vivo me siento! – Exclamó el árbol cuando, después de una larga espera, pudo disfrutar la lluvia que los pajaritos dejaban caer sobre él.
Todos los días los pájaros regaban con mucha generosidad al árbol. Poco a poco el viejo árbol recuperó su color, miles de hojas volvieron a crecer entre sus ramas y su tronco se hizo cada vez más fuerte. Todo él volvió a estar lleno de hermosas y fragantes flores que pronto se convirtieron en jugosas manzanas. ¡Que bello! El árbol volvió a sentirse vivo y frondoso.
La hermosura y presencia que el árbol daba al patio en el que vivía provocó que la casa nuevamente fuera habitada. Todos los días la señora de la casa regaba al árbol y éste cada vez estaba más resplandeciente. Los pájaros felices por la llegada de la primavera y por la dicha del árbol decidieron organizar una fiesta en el patio
– ¡No! ¡No se paren en mis ramas! ¡Por favor! – dijo el árbol a los pajaritos- Que no ven que pueden tirar mis hojas, mis flores y mis frutos. A nadie le gustan los árboles secos. Busquen otro árbol para brincotear, hay muchos por este lugar.
El pajarillo rojo, junto con los otros pájaros, se fueron muy tristes por la actitud del árbol a quien tanto habían ayudado.
La mañana siguiente una paloma intentaba hacer su nido en el viejo árbol. El árbol muy enfadado dijo:
– ¡Oye! ¿Qué no vez que puedes dañar y ensuciar mis ramas y mi tronco? Hay muchos lugares donde puedes hacer tu nido, por que no buscas otro.
La paloma huyó avergonzada y entristecida. Lo mismo pasó con el jilguero y la calandria que intentaban alimentarse con las manzanas del árbol.
Poco a poco, los pájaros se alejaron del patio y dejaron de visitar al árbol. El árbol continuó hermoso y resplandeciente por un tiempo; pero cada día se sentía más pesado. Nadie comía ni tiraba sus manzanas. Tenía tantos frutos y flores encima que sus ramas y su tronco comenzaron a inclinarse. La señora de la casa pidió a su esposo que cortara el árbol porque en cualquier momento podría caerse.
El árbol, que escuchó lo que la mujer decía a su marido, lloró desconsoladamente. Los pájaros escucharon sus sollozos y acudieron al patio.
– ¿Qué te pasa viejo árbol? ¿Por qué lloras? – Preguntó el pajarillo rojo.
– ¡Estoy muy triste! ¡No dejé que ustedes tiraran mis flores, ni que comieran de mis frutos, ahora mis ramas pesan tanto que mi tronco se ha doblado y van a cortarme!
– No llores, viejo árbol, nosotros te vamos a ayudar – Dijo el jilguero.
Las aves comenzaron a tirar las manzanas, las flores y las hojas del árbol. Poco a poco el viejo árbol se enderezó y los señores de la casa decidieron no cortarlo. Aunque por un tiempo el árbol sólo tuvo unas cuantas hojas entre sus ramas, vivió feliz rodeado de pajaritos pues logro comprender el valor del agradecimiento, del servicio y de la generosidad.