Hola hermano @hiroyamagishi
Desde niños nos han enseñado a encomendarnos a Dios, a pedirle en nuestras necesidades, a suplicarle para que solucione todo aquello que se escapa de nuestras manos; por lo menos así lo han hecho aquellos padres que han sido a su vez educados en la fe y en la oración.
En el transcurrir de la vida comenzamos a entender que Dios no siempre trae lo que pedimos sino lo que necesitamos.
La biblia nos enseña que Jesús Dice: de Jesús “pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá; porque al que pide se le da, el que busca encuentra y al que llama se le abre”.
Cuando sentimos que no logramos o que pedimos debemos entender que debemos esforzarnos en ser más humildes y corregir actitudes negativas
Es importante saber que nuestra relación con el Señor no debe depender de las necesidades temporales que tenemos pues eso equivaldría a verlo como una tienda de abastecimiento y no como nuestro Padre que quiere nuestra salvación en Cristo.