Nada es perfecto, nosotros como hijos no comprendemos muchas veces los sacrificios que nuestros padres hacen por nosotros, hasta que estamos en sus mismos zapatos. En ese momento es que aprendemos abrirnos, perdonar y perdonarnos. El amor de los padres hacia sus hijos es digno del cualquier sacrificio.
Excelente tu post.
Saludos.
You are viewing a single comment's thread from:
asi es