Tal vez debiéramos enviarle a los antiguos 'centros de salud' clásicos, donde los sacerdotes curaban a través de las experiencias oníricas de los pacientes. Y es que, como muy bien dice Jacobo Siruela, existe todo un mundo bajo los párpados.
You are viewing a single comment's thread from:
Un mundo que debería ser un tesoro, no un dragón al que tenerle miedo.
Ese es el principio de todo mito: el dragón que tiene que vencer el héroe para alcanzar el tesoro. En este caso, el dragón es fiero, pero el tesoro merece la pena.