Si hay algo que odio del lenguaje humano son las traducciones. Tomar contenido creado en un idioma y traducirlo a otro completamente distinto, perdiendo así el significado de muchas expresiones imposibles de traducir. Películas, canciones y libros que pierden toda su esencia si son consumidos en otro idioma son el pan de cada día de cualquiera que no hable el lenguaje original de una obra. Y dependiendo del tipo de traducción puede ser más o menos extremo. Por ejemplo, en el caso de los libros, los traductores se pueden salir con la suya traduciendo una palabra en una expresión de muchas más palabras pero que mantenga el mismo significado; por otro lado, los doblajes de películas no tienen tanta libertad por lo que muchas veces, para sincronizar el audio con la imagen, cambian totalmente el significado de algunas frases, alterando así la esencia de los personajes o distorcionando por completo el significado de una escena. Y por último tenemos el atroz caso de las traducciones en vivo, que confunden más de lo que ayudan. Todos hemos vivido la incómoda situación de estar viendo un evento de premiación donde el presentador lanza un juego de palabras que hace estallar la risa en la audiencia, mientras el traductor comienza a tartamudear y sabes que por su cara corre el sudor: no sabe cómo traducir el chiste. Y te quedas viendo a la pantalla, a aquellas caras que lloran de risa, sabiendo que te acabas de perder el que probablemente será el mejor chiste de la noche
Sin embargo, ninguna de las razones que expuse en el anterior párrafo me hace odiar las traducciones. De hecho, creo que llegar tan lejos como para decir que odio las traducciones fue un poco extremo. Personalmente, me parece que consumir contenido en un idioma que no sea su original hace que la experiencia sea inmediatamente inferior. Sin embargo entiendo que es de gran utilidad para mucha gente alrededor del mundo, y estoy completamente seguro que si no fuera gracias al trabajo de los traductores el mundo sería un lugar mucho menos avanzado tanto tecnológica como económicamente. Lo que realmente odio de las traducciones es tener que necesitarlas; depender de ellas. En general, no me gusta depender de otros, por lo que depender de otra persona para poder consumir una obra o una pieza de contenido me enloquece. Principalmente porque tengo unos gustos muy raros, y muchas de las cosas que disfruto a nadie más le interesa, así que nadie se ha tomado la molestia de traducirlas. El principal factor que me hizo aprender inglés fue la cantidad de contenido que no era capaz de consumir por culpa de la diferencia lingüística. De hecho, esta es la razón por la que siempre insto a la gente a aprender inglés: simplemente hay más contenido en ese idioma.
Estarán pensando «Llevamos dos párrafos y aún no has mencionado para nada sobre cómo aprender inglés» y con razón. Lo que quería con estos dos primeros párrafos era recordarles por qué aprender inglés. Entiendo que muchísimas personas se frustran o se estresan a la hora de querer aprender otro idioma, y muchas tiran la toalla. Y aquí es donde entramos en tema. Estoy completamente convencido de que la cantidad de frustración que se crea alrededor del aprendizaje de idiomas es culpa del sistema educativo. Si llevan tiempo siguiéndome sabrán el odio que le tengo al sistema de educación tradicional, y la enseñanza de idiomas de dicho sistema no se salva. De hecho me parece que el inglés es una de las materias que peor se «enseña», pero esto puede ser simplemente porque yo aprendí inglés sin necesidad de la escuale, mientras que no sé absolutamente nada sobre matemáticas. Estoy divagando mucho, así que vayamos directo al grano. Muchas son las razones del fracaso de la escuela en su tarea por enseñarte inglés, pero la que me interesó hoy y la que vengo a discutir es una muy específica y sencilla: Te lo están enseñando al revés.
Ahora comencemos a divagar de nuevo. El caso es que ahora, después de aprender inglés, me provocó aprender coreano, así que mi proceso de aprendizaje de idiomas volvió a 0%, y me vi obligado a comenzar a buscar información sobre el tema de nuevo. De clic en clic llegué un día al canal «MotivateKorean» de un chico americano llamado Jeremy que vive en Corea y da tips sobre cómo aprender coreano. Esta mañana vi este video de su autoría, en el que habla del mismo tema que yo toqué en mi anterior post sobre aprender inglés: escuchar, escuchar y escuchar el idioma hasta llegar a entenderlo. Básicamente, aprender como un bebé.
En su video, Jeremy explica cómo, luego de escuchar un idioma una, y otra, y otra vez, comienzas a descubrir patrones en el lenguaje. Y eso es exactamente lo que deberías estar buscando cuando eres un principiante: patrones —más adelante lo discutiremos a mayor profundidad. En oposición a esto, la escuela nos intenta enseñar inglés utilizando, ingenuamente, traducciones. Traducir del español al inglés lo que queramos comunicar. Nos enseñan frases muy específicas que sí, son útiles en la vida real, pero que no nos ayudarán a tener una conversación. Todos sabemos decir «My name is...» pero de nada sirve si luego de soltar la frase que conocemos, la persona con la que estamos hablando responde algo que está fuera del guión que nos dio la escuela. No entenderemos lo que la persona nos está intentando decir, y entraremos en pánico. Por esto, es primordial que, antes de intentar hablar, aprendamos a escuchar. Es la escuela se tiene muy arraigada la idea de que alguien que sabe inglés es alguien que puede hablar inglés, y comienzan a enseñarnos a hablarlo desde el día uno.
Si me permites darte una revelación, lo hare: cuando estás comenzando a aprender no hay cosa más irrelevante que hablar el idioma. Del empeño en intentar expresarnos en inglés desde el primer momento nace el problema de aprenderlo al revés. Queremos decir algo en inglés, pero no sabemos cómo hacerlo; sabemos lo que queremos expresar en español, pero somos ignorantes de su traducción al inglés. Por tanto, buscamos la traducción de la expresión en inglés, e intentamos aprendernos el resultado de nuestra investigación. Y permítanme decirles que no hay forma más ineficiente de aprender un idioma. No sólo estás obligando a tu cerebro a recordar mucha información nueva en un mismo momento, también es posible que estés aprendiendo algo erróneo. No todo se puede traducir bien de un idioma a otro, por lo que existe la posibilidad de que la traducción literal de una expresión en español sea muy poco natural en otro idioma, o incluso puedes estar diciendo algo totalmente erróneo. Por ejemplo, si quieres decir «Somos cuatro» en inglés, decir «We are four» no es nada natural, ya que en inglés eso significaría «Tenemos cuatro años». Para decir «Somos cuatro» la expresión apropiada sería «There are four of us» cuya traducción literal es «Hay cuatro de nosotros» lo que es muy poco natural en español. ¡Las traducciones no funcionan para aprender idiomas!
Por esto lo más importante a la hora de comenzar a aprender un idioma es acostumbrarte, familiarizarte con su sonido, y escucharlo, escucharlo y escucharlo hasta que no puedas más. ¿Recuerdas lo que dije antes sobre buscar patrones? Es el momento de explicarlo. He leído a muchas personas que han intentado aprender otros idiomas que odian la idea de «aprender como un bebé». Les parece tremendamente frustrante y estresante, principalmente porque no logran entender nada. Y ahí está su problema: lo intentan entender. No intentes entender. Si estás sólo comenzando no intentes entender el idioma cuando lo escuches; no lograrás entenderlo, sólo lograrás estresarte. La idea con escuchar mucho un idioma no es entender todas las palabras del lenguaje, olvídate de eso. La idea es, como dije, encontrar patrones. Si escuchas mucho un idioma comenzarás a encontras palabras que se repiten con mucha frecuencia. Palabras que, de tanto escucharlas, ya distingues y conoces, aunque ignores su significado. Eso es lo que debes buscar; te facilitará el trabajo una barbaridad.
Una vez comiences a sacar patrones de un idioma, que empieces a distinguir ciertas palabras o expresiones, puedes buscar su significado, y será infinitamente más sencillo que buscando la traducción del español al inglés. Por ejemplo, digamos que estás viendo un video de especial de San Valentín en inglés, y escuchas una y otra y otra vez la palabra «love», y además la escuchas entre dos palabras que ya conoces «I» y «you». La escuchaste tanto que ya se te pegó la palabra. Cuando buscas su significado, descubres que «love» significa «amor» y ahora sabes que «I love you» significa «te amo». Y, si te pones a pensar, nunca tuviste que, conscientemente, aprender algo. Estabas escuchando lo que decían sin la intención de entender, sólo con la intención de escuchar, y no tuviste que hacer ningún esfuerzo para encontrar que una palabra se repetía todo el tiempo. Simplemente la escuchaste tanto que se metió en tu cerebro. Todo lo que tienes que aprender conscientemente es aprender sus ignificado, y haciéndolo en este sentido —inglés>español— al contrario de como nos enseñan las escuelas —español>inglés— te facilitas mucho esta fase. Al buscar el significado, no debes recordar nada. La palabra en español ya la conoces, estás muy familiarizado con ella. En vez de buscar la traducción de una palabra y enfrentarte a la laboriosa tarea de aprender una combinación de letras completamente nueva para ti, todo lo que tienes que hacer es crear una relación entre dos palabras que ya conoces. Esa, me parece a mí, es la manera menos dolorosa de aprender un idioma. Esta debería ser la espina dorsal de tu aprendizaje de inglés. Fue como yo aprendí inglés, y es como ahora estoy aprendiendo coreano. Si les da curiosidad en un futuro les puedo comentar sobre mi experiencia aprendiendo coreano. En ese momento tendré más pruebas de que yo tengo la razón y la escuela está equivocada.
Amigo, estoy TOTALMENTE de acuerdo contigo, también hablo inglés pero no por la escuela sino por instrucción propia y acepto que nunca se deja de aprender.
Soy de Venezuela (desconozco tu país de procedencia) pero supongo que es el mismo sistema educativo obsoleto, en donde no se construye el aprendizaje sino que se hace repetitivo, donde lo importante no es hacer el conocimiento o la información parte de ti sino pasear en el, cual único fin será entender de momento y olvidarlo luego de la prueba.
Realmente me molestan los profesores que enseñan asi, donde es "dar tema, ""explicar"" y evaluar" El inglés es un tema que no todos dominan de la misma manera, el inglés se tiene que enseñar de manera creativa, didáctica y hasta activa si se puede decir. Pues como tu lo mencionas, es un idioma diferente al español y el hecho de que digan que es "lo mismo pero al revés" confunde a muchos estudiantes desde el principio. Supongo que se deben instruir mejores profesores de ingles, o que deberían dar clase personas cuyo lenguaje nativo sea el inglés pero me causa gracia que incluso el español es muy dificil de aprender y para ser profesor de inglés debes saber hablar español y si eres una persona cuyo lenguaje nativo es el inglés debiste aprender la gramática y ortografía del español como mínimo para poder enseñar. Nunca he visto realmente el proyecto de Open English pero su éxito (aparte de la publicidad) puede recaer en la ventaja de tener profesores como antes te he mencionado y especificado.
En fin, me gustó mucho tu post. #Resteeam and #Follow
Sí, yo también soy de Venezuela y estoy completamente de acuerdo con todo lo que escribiste. La frase "es lo mismo pero al revés" sólo confunde a la gente, porque es falso. Aplica en algunos casos, pero el inglés es un idioma completamente distinto y simplificarlo a una sola frase no ayuda a la gente.
Me parece muy fino que hayas aprendido a conscientizar el aprendizaje de un nuevo idioma; hay pocas cosas tan útiles como poder entender o comunicarte en distintos idiomas. Y también que tu principal consejo y estrategia sea reconocer patrones, que también pueden ser llamados sintagmas: unidades que se ordenan unas con otras de maneras predecibles y específicas al momento de hablar y escribir, al ir reconociendo las relaciones sintácticas en la misma práctica, además de entender los significados de las palabras, y sobretodo, los contextos de enunciación (si es un chiste, si es una metáfora) es cuando se comienza a entender realmente los idiomas.
Sólo una aclaración: el lenguaje (humano) es la capacidad que tenemos todos los seres humanos para crear sistemas que nos permiten expresar, comunicar y entender, estos sistemas son los idiomas o lenguas. Las traducciones están más en el plano de la lengua/idioma, que en el lenguaje como capacidad.
Siempre que tenga una excusa para llevarle la contraria al sistema educativo la aprovecharé jajajaja y el inglés es un tema que me molesta sobre todos los demás porque una vez sabes inglés, estar en una clase de inglés es una cosa vergonzosa. No es por darmelas de experto, pero te lo juro que yo tenía muchísimo más nivel de inglés que mis profesores.
Eso que dices de también comprender los contextos en los que se usan algunas expresiones es algo muy importante que se me olvidó por completo escribir en la publicación. La forma de hablar un idioma varía dependiendo del tono del discurso, y eso es algo que muy pocas veces tocan en aulas de clases o libros de texto. La diferencia entre «want to» y «wanna» la ignoran por completo. De hecho, ignoran muchísimo las diferentes maneras de hjablar que tienen todos los idiomas. Yo por varios años viví en la ignorancia de pensar que «want to» y «wanna» eran dos expresiones completamente distintas, porque nunca me lo habían enseñado. Y eso es algo que captarías de inmediato —o al menos mucho más rápido— si no dependieras únicamente de libros de texto y áulas de clase.
Además, hay cosas que enseñan que en realidad nunca se usan, y cosas que se usa mucho pero que nunca enseñan. Por ejemplo, ahora que estoy aprendiendo coreano, en ese idioma hay como 50 niveles de formalidad distintos, y los cursos de idiomas y libros de coreano esperan que uno los aprenda absolutamente todos. Pero escuchando conversaciones me he fijado que sólo se utilizan tres o cuatro niveles de formalidad distintos dependiendo de la situación. Por el contrario, hay expresiones muy específicas que tienen una variedad casi infinita, y los libros de texto lo ignoran. Para decir «gracias» hay infinidad de formas, dependiendo de la persona a la que se lo dices o la situación en la que lo dices. Así que al final del día los libros y los métodos de estudio tradicional no son muy útiles para aprender las cosas realmente importantes.
Y gracias por la corrección, intentaré tenerlo en cuenta para no confundir los conceptos cuando vuelva a hablar de idiomas en algún momento en el futuro :3
estoy comenzando en un curso de ingles y el profe inicio por la pronunciación y como crear oraciones , hasta ahora ha sido bastante bueno y útil .
La pronunciación es otra cosa. Entender un poco de la pronunciación de otro idioma es como aprender el abecedario. Ya lo de crear oraciones no me convence tanto. Me parece que enseñando eso hacen que tomes consciencia de un proceso que debería ser inconsciente: crear una oración. Cuando uno habla en español no está pensando «ok, sujeto, verbo y predicado. Tendo que decirlo bien». No. Nosotros lo decimos naturalmente, de forma inconsciente. Igual supongo que todos aprenden de formas diferentes, yo estoy compartiendo el sistema que me funciona a mí y el que me parece más eficiente y efectivo...
Wow, tienes razón en cada palabra que dices, queremos aprender hablar, cuando no nos tomamos la mínima molestia por escuchar, es así como aprendemos el español, escuchando...Muy bueno. Por cierto, ¿cúanto tiempo te llevo aprender inglés?
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