Imagínate por un momento, encontrarte sentado en el sofá de la sala de tu casa, viendo una película o cualquiera de las tonterías que, a menudo, pasan por la TV. Todo va perfecto, un clima sabroso, ni mucho frío, ni mucho calor, la puerta está abierta, se deja ver como va cayendo la tarde. Pero tú estás cómodo, ahí en tu sofá, recostado en una comodidad prácticamente perfecta, donde nada podría atentar con esta paz, en tu mejor momento.
De pronto, sin comértela, ni bebértela, te comienzan a sudar las palmas de las manos, los pies no se quedan atrás, igualmente son un charco de sudor. El brazo izquierdo, comienzas a sentir una sensación de calor a brasas, que se va extendiendo como un fuego forestal. Desde abajo hacia arriba comienza un hormigueo, que cuando llega a tu estómago, se te comienza a acelerar el pulso, es cuando ese salto en el estómago comienza a preocuparte.
El salto en el estómago, cada vez se hace más intenso, el corazón comienza un trote inesperado, así sin más, como si alguien azotara a una bestia con fiereza, esta bestia no puede hacer más nada que correr lógicamente, pero tú solo puedes pensar en el ¿por qué? Pero eso no es todo, mientras sucedía todo eso, en tu espalda una sensación de dolor, como la de una tonelada de escombros que comenzaba a comprimir tus pulmones, los que ya se encontraban hiperventilando, por cierto, mientras ibas viendo en primera fila, como toda tu vida te pasa por el frente.
¿Qué ha pasado?, ¿dónde está el oxígeno, cuándo hace falta?, comienzas a caminar en círculos por todo el apartamento, ni preguntes el porqué, solo te pierdes en un laberinto que tu cerebro alterado, va dejando caer a pedazos a tus pies. Imagínate pasar por todo esto solo en casa, quien te ayuda a callar el zumbido ruidoso que provoca tanto ruido en tu cabeza a la vez. Así comienza este conflicto bélico, del cual, si es la primera vez que lo experimentas, tendrás mucho más riesgo a ser la víctima en el peor de los casos.
Acabas de sufrir un ataque de ansiedad, y jodidamente todo está en la mente, eso lo sabrás luego de varias sesiones de esta misma receta atormentadora, por lo tanto, solo tú puedes parar esta agonía. ¡Eso a mí no me va a pasar! Así dije muchas veces, cuando era el espectador, como mismo, quizás dirás al final de estas líneas, pero no podrías estar más equivocado que yo, pues solo necesitas un clic, un pequeño detonante que te lleve a estas situaciones. Los medicamentos ayudan, las terapias ayudan, los remedios naturales ayudan, pero el poder real está en ti.
En buscar en ese preciso momento quien sabe que, un buen pensamiento, quizás, que te ayude a liberarte de todo ese pánico que provoca tanto desorden en tu cuerpo. Pero confieso que no es para nada agradable, superable, sí, toma su tiempo controlar la fiera interna. Hasta que recuperas el aliento, cuando el oleaje de ese mar bravío que azotaba a tu costa, o la llamada zona de confort, se convierte en una brisa de alivio después del huracán.
Muchas experiencias, como estas, hacen que la mayoría de las personas cambien, incluso radicalmente, ya sea para bien, o quién sabe las consecuencias en el peor de los casos. Algunos terminan encontrando, dicen que a Dios, en este punto, quiero detenerme por un momento, porque es demasiada coincidencia de que cuando tienes esa sensación de que puede ser tu momento, pero no lo es, como si de pronto recibieras otra oportunidad, muchos terminan concretando... ¡Conocí al señor!
¿En serio, tuviste que pasar por todo eso para conocerlo?, algo parecido le ocurrió al reguetonero Farruko, o así, más o menos, contó de cierta manera su historia de conversión a la religión, en una entrevista que le cediera al popular Youtuber "El Chombo". Mientras lo escuchaba contar su experiencia, tal pareciera que fuera mi persona a quien describiera, solo que yo no encontré al señor, porque la realidad es que nunca ha estado perdido, aunque no me diga una sola palabra, aunque no sea un ser perfecto, sigo siendo siempre el mismo con todo y para todos.
En esta guerra interna, la que recibo más menos dos o tres veces en la semana, a ráfagas de a quemarropa, aunque a veces me deja tranquilo por un tiempo. Pues nada, convivo además con los altos volúmenes de estrés, como los que provoca vivir en situaciones como las de mi terruño compartido. Ataques de pánico, ansiedad, miedo a la vida, tú llámalo como quieras, al final eres quien creas todo este mapa gráfico en el que juegas, a no perderte ni un segundo de vivir. "Si nos dejan"... como dijera Luis Miguel.
Vuelvo a mirar por la puerta abierta, ¿qué veo?, otro día hermoso, en el que estamos vivos. Así que tómate de vez en cuando una pausa, frena la carrera de la que vienes, para disfrutar de ese lugar que te llama, por un momento siéntete libre de ser tú mismo, de la suerte que tienes al caminar un día más por este mundo, donde escribes tu historia.
Las imagenes utilizadas en el post son ilustraciones del artista plástico @davidsantafe, pueden encontrar sus trabajos visitando su blog personal.
Amigo nunca se ma ha manifestado la ansiedad de esa forma pero cada cuerpo lo refleja a su modo, he lidiado con otras dolencias provocadas por el estrés que van desde poderosas migrañas que me derrumban, hasta vestigios de soriasis, lo mejor de todo es tener conciencia de lo que vivimos y sentimos , para poder combatirlas concientemente . Sin dudas el Yoga te ayudaría porque te ayuda a tomar conciencia de como lidiar con nuestro cuerpo porque como dice la profe @saraleo, esa es nuestra verdadera casa. Abrazo muy apretado para ti ❤️😘
❤️🙏💯
Saludos amiga agradecido por leer y compartir con mi contenido como siempre, estoy de acuerdo con que quizás participar en estas sesiones que tanto disfrutan Haciendo Yoga podrían ayudarme bastante. Todos los días me tomo mi tiempo para hacer una caminata y así descargar un poco de energías. Que tengas un buen fin de semana
Buen post @eduardo900613, y gracias por la promoción
Gracias a ti por prestar tu arte amigo ☺️
Me parece que eres muy valiente al tocar este tema tan importante, creo que todos en algún momento hemos sentido algo de ansiedad, aunque esos ataques de pánico son mucho más preocupantes. Por eso hay que mantener siempre una actitud positiva ante la vida, ya sea en la situación que estemos viviendo, no nos podemos dejar vencer, y sí, es más fácil decirlo que hacerlo, por eso hay que buscar ayuda a tiempo si es necesario.
Saludos Wendy23, agradecido por llegarte y dejar tu apoyo, en realidad es un tema bastante sencible por lo personal, aunque estoy seguro que a muchos le a afectado en más de una ocasión, mucho más cuando se tiene volúmenes de estrés. Sin embargo, no todos funcionamos igual ante las situaciones, algunos se rompen, pero es muy importante eso que dices buscar ayuda. Que tengas una buena tarde.
Amigo Creo que tus reflexiones son bien importantes. La dinámica de la vida moderna no lleva muchas veces a un ritmo que el binomio mente-cuerpo no puede soportar. Es preciso entonces hacer pausa, examinarnos, darnos cuenta de que somos los que sentimos eso no que somos lo que sentimos. Somos humanos. Ahí están y estarán nuestros miedos, inseguridades por siempre. Lo importante es aprender a manejarlos.
Ahí está la cuestión, aprender a enfrentarlos, gracias por llegarte Robe, espero leerte pronto por acá, bendiciones a todos por casa. Buena noche.
Wao! Las imágenes acompañan perfectamente todo lo que cuentas, tal cuál como es un ataque de ansiedad. Creo que todos tenemos situaciones específicas que pueden detonar un episodio como este, cuando no sabemos lidiar con algo que se nos hace muy grande o quien sabe porque motivo.
Sufrí muchos ataques de ansiedad en el primer año cuando estudiaba medicina y puedo asegurarte que Yoga es una herramienta que me ayudó mucho a superar esto.
Es genial hablar de estos temas, gracias por compartir 👏💯
Chino, solo paso a decirte cuánto siento todo esto. La ansiedad y la depresón se han convertido en una pandemia de proporciones inimaginables. Y lo que puedo regalarte desde mi experiencia es esto:
No escuches más Reguetón, destiérralo de tu vida. Parece una tontería pero no lo es. Los sonidos de baja vibración con los que está compuesto, te van acabando, y lo peor; a tu chama. Escucha música de altas vibras, clásica, jazz, y si es con letras; que digan cosas bonitas y muy positivas.
Sientate todos los días 20 minutos a respirar con conciencia. Con la espalda recta, cierras los ojos y pones la mente en la entrada y salida del aire, la mente posada en las fosas nasales y en el ombligo, observando como sube y baja el vientre. Así de sencillo.
Consume audiovisuales sin violencia, comedias, musicales, dramas amorosos...etc nada nada de violencia.
Y finalmente te recomiendo un libro; "El poder del ahora" de Ekhart Tolle. Léetelo ya.
Me dices el próximo Sábado como te sientes !!! Nos vemos en una semana 🥂
Si tú supiera mi amiga que mi teléfono lo que tiene es pura música instrumental y clásica, es lo que me ha ayudado, música de ambiente de naturaleza y esas cosas han ayudado mucho. Gracias por tus consejos, los guardaré para mi incluso compartirlos con alguien más que se sienta asi. Agradecido por llegarte, que tengas un buen fin de semana.
Que bueno, ya tienes una pelea ganada. En mi juventud, aparte de la sabrosa música cubana, teníamos el Heavy Metal; una música rebelde y catártica, muy liberadora. Ahora hay más amarres mentales a pesar del despelote aparente, ha bajado el nivel cultural de la población y las crisis provocan todo tipo de estados de ánimos en consonancia con ella. Recuerda que somos energía y resonamos con la energía que hay alrrededor. El poner de nuestra parte, significa tomar las medidas para cambiar la energía que traga y tritura. Tengo la suerte de trabajar con el Yoga, que durante siglos ha demostrado ser efectivo, y es simplemente recolocarte aquí y ahora, cosa que no es fácil en la práctica. La respiración consciente es una de las herramientas más eficaces que existen, y siempre está a mano. Solo hay que entrenarla. Hazlo y verás resultados desde el primer día, solo lleva unos minutos.🙏🤗
Por lo que cuentas, estás pasando por una crisis, dónde factores externos y estreches te están afectando. Quiero que sepas que los barcos no se hunden por el aguá que les rodean, sino por la que les entran.
Buena esa, hasta la próxima aventura ☺️